Es un material resinoso que tiene por objetivo rellenar los surcos del diente para evitar que las bacterias y alimentos logren entrar en estos pequeños espacios y generen caries dental, además de facilitar el cepillado dental.

Los selladores de fosas y fisuras se consideran un tratamiento preventivo para evitar el desarrollo de caries. Entre otros métodos de prevención están las pastas de bicarbonato, para remineralizar y fluoradas; es importante acudir con un odontólogo certificado para evaluar cual es el procedimiento indicado en cada paciente.

El sellador de fosas y fisuras está indicado para pacientes con: 

•  Riesgo de caries moderado o elevado.

•  Pacientes con caries superficial.

•  Pacientes con defectos en el esmalte dental.

•  Pacientes con fosas y fisuras profundas.

•  Pacientes con dificultad psicomotora.

•  Niños entre 6-9 años de edad.

Este método preventivo es un procedimiento de menor costo que si se deja los surcos sin protección con la posibilidad de que se genere una lesión cariosa  y se requiera otro tipo de restauración. Un revisión semestral con el odontólogo es necesaria para verificar que los selladores de fosas y fisuras se encuentren en buen estado y en caso de ser necesario volver a colocar.